Puede llegar la gran sorpresa

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El domingo puede ser un buen día, más que un buen día, puede ser un día perfecto. Lezama acogerá un partidazo, nada más y nada menos que el derbi vasco femenino. 

Athletic y la Real se enfrentarán en un escenario a priori frío pero que con los ánimos de los aficionados de los dos bandos se irá calentando.

Es el segundo derbi de la temporada. En el primero, el que se jugó en Zubieta, el Athletic venció  a la Real por 1-3. Pero ese resultado ya está más que olvidado, en Lezama puede pasar de todo, es un nuevo partido que no entiende de estadísticas. 

El equipo bizkaino lucha por la liga, está a 3 puntos del líder, el intratable Barcelona. El equipo gipuzkoano, en cambio, está en séptima posición a 5 puntos de la Copa. Pero el derbi no hace caso a estas diferencias. Las fuerzas son iguales, la ilusión suele ser la única protagonista del partido.

El Athletic quiere conseguir los tres puntos sí o sí. Si pasa lo contrario se alejaría del líder y a la vez se complicaría el conseguir la Liga. Va a ir a por todas. La Real no será menos. El equipo txuri urdin viaja a tierras bizkainas con la moral por las nubes tras ganar al Valencia y al Atlético de Madrid, sobretodo al vencer en Madrid. Además, quiere seguir escalando posiciones, quiere intentar estar en lo más alto posible.

No hay que olvidar que el Athletic se ha reforzado mucho esta temporada, Erika Vázquez e Irene Paredes han dado muchas alegrías al equipo bizkaino en lo que vamos de temporada. Irene, ex realista, se ha convertido en una de las jugadoras más importantes del Athletic. Será un partido muy pero que muy especial para la legazpiarra. La Real, por su parte, tiene tres bajas: Itxaso y Guru no jugarán por lesión y Esti Aizpurua no podrá jugar por la tarjeta roja que vio en Madrid.

Es posible que llegue esa gran sorpresa, la victoria de la Real, ¿por qué no? Ya hemos dicho que los derbis no entienden de puntos ni de la clasificación. Entiende más de ganas, ilusión, intensidad... Y la Real va sobrada de esas cualidades.

Para terminar, los aficionados también intentaremos ayudar a conseguir la victoria. Procuraremos que la Real se sienta como en Zubieta. Intentaremos que el ambiente de las gradas sea lo más especial, perfecto para este tipo de partidos.