Ilusión por crecer

A punto de comenzar una nueva temporada y a causa de los cambios producidos en el equipo donostiarra, las seis incorporaciones hablan sobre los objetivos y las claves de este nuevo proyecto, con la ilusión de llevar a lo más alto a la Real

Las personas van y vienen. Y es lo que acostumbra el fútbol: un movimiento constante. Tanto en el verde como fuera de él. Llegado el mercado estival es inevitable hablar de altas y bajas. Los que se van y los que vienen. Por ello, un equipo está obligado a amoldarse cada pretemporada. 

La Real –en las dos últimas temporadas, sobre todo- ha tenido que hacer frente a varias bajas. Unas, por decisión propia del club y otras, por ofertas de otros equipos. Con lo cual, ha tenido que trabajar duro nada más acabar la temporada. 

En los fichajes siempre ha resaltado la juventud. Con ello, el club muestra su firme intención de crear un proyecto para un futuro cercano. Pero algo ha cambiado. Mientras en los primeros años destacaban las incorporaciones de jugadoras guipuzcoanas, ahora la Real también atrae a foráneas. El año pasado la gran novedad fue Cristina Pizarro “Chini”, madrileña procedente del Rayo Vallecano. Superado esa barrera, y siguiendo con la apuesta por el fútbol guipuzcoano, este año han aterrizado en la entidad txuri urdin dos catalanas; además de una navarra, una alavesa y dos guipuzcoanas. 

Seis fichajes de calidad. Cuatro de ellas ya conocen a la perfección la Primera División femenina. La ilusión de todas ellas juntando con la experiencia de las que se mantienen en el equipo, la Real empezó motivada la pretemporada. Pero por ahora, sin un objetivo claro en lo que a la competición se refiere, tal y como mencionó el entrenador Igor San Miguel en la rueda de prensa. Los fichajes tampoco quieren fijar objetivos. “Estamos a expensas de vernos como nos adaptamos, vernos en la Liga, a ver en qué punto estamos, porque cada vez es más competitiva” explica Manuela Lareo, atacante procedente del Valencia. 

Con el Valencia, precisamente, Lareo perdió la final de la Copa de la Reina la temporada pasada. Y con el Athletic en el 2014 y 2012. Con una pequeña sonrisa reconoce que tiene una espina clavada en esa competición, pero que es una cosa personal. Advierte que en cada ocasión que ha llegado a la final fue a consecuencia de formar un buen grupo, de hacer un buen trabajo colectivamente, sin ser nunca las favoritas: “Así que nunca se sabe”. 

Buen ambiente y el trabajo colectivo deben ser la esencia de este equipo. Es lo que recalcó el entrenador en la rueda de prensa, “porque cuanto mejor ambiente tengamos en el vestuario, seguro que van a suponer puntos”. Asimismo, Ane Etxezarreta explica que en ese aspecto aportará todo lo que pueda. Y aunque Paola Soldevila no se haya unido al grupo, admitió a la web de la Real que ya le han hecho bromas en euskera. La de Tarragona estuvo disputando el Europeo de Israel con la selección española sub19, junto a las realistas Nahikari García y Leire Baños. Se han proclamado subcampeonas, precisamente. Nada más terminar la competición europea expresó que está con ganas de conocer a las demás compañeras, pero ahora le toca disfrutar de las vacaciones –hasta el 10 de agosto-. 

De momento, Ane Etxezarreta e Iraia Iparragirre solo piensan en hacer una buena pretemporada e ir partido a partido. Ambas guipuzcoanas han jugado en la Segunda División –con el Oiartzun y Añorga, respectivamente- y están con ganas de aprender. “Ya se verá luego”, dice Iparragirre. Subraya que irán cogiendo experiencia según vayan jugando y a pesar de ser un grupo joven, “tiene mucho que ofrecer”. 

Trabajo. Esa es la clave de Nuria Mendoza. Como ya adelantó Carlos Belmar –seguidor y conocedor del equipo femenino del Espanyol y colaborador del programa de radio Podemos Jugar, “Mendoza es una jugadora profesional, trabajadora y muy comprometida; lo da todo”. La futbolista de Monistrol de Montserrat recaló en el club perico cuando tenía tan solo 11 años. Y ha jugado las últimas cuatro temporadas en la máxima categoría. Las ganas de cambiar de aires, los problemas económicos del Espanyol y la llamada de la Real hicieron que la catalana se decidiese por venir a San Sebastián. También por el verdadero interés que le mostró el club desde el primer instante, “y porque la Real siempre ha sido un equipo potente”. 

Varios retos 

Izaskun Leoz, después de dejar el Athletic está deseando empezar su nueva andadura en la Real. Llega de jugar buenos minutos de rojiblanca. En un principio el Athletic la fichó para el equipo filial pero en seguida dio el salto al primer equipo. De estar jugando en un conjunto veterano, recala en un grupo donde resalta la juventud. “Ayuda un poco que estés jugando con compañeras de tu edad”, dice Leoz. 

El equipo tiene un doble reto. Que las jóvenes cojan confianza y, asimismo, la experiencia y que el equipo se entienda bien en el campo a causa de tantos cambios. “Se está haciendo hincapié en que nos juntemos bien con el equipo, nos adaptemos bien a lo que ya había, al grupo que sigue en la Real”, comunica Lareo, agregando que para eso está la pretemporada. 

Según Mendoza, sin embargo, no será una tarea tan complicada. La catalana jugó en las categorías inferiores de la selección española y de ahí ya conoce a las txuri-urdin María Díaz Cirauqui, Leire Baños, Paola Soldevila y Nahikari García. “Creo que la conexión de la selección ayudará”, comenta. 

Izaskun Leoz también se reencontrará con una amiga y compañera que conoce a la maravilla: Cirauqui. Han jugado juntas en el Osasuna desde que tenían diez años –a excepción de las últimas dos campañas-. Pero, casualmente, ambas juegan en el mismo puesto, en la banda derecha. Eso no es un problema para la pamplonesa: “Aumentará la competitividad y se creará un pique sano entre las dos; y, al mismo modo, le pondremos difícil al entrenador”.

Iraia Iparragirre, por su parte, tendrá su particular reto. Tiene como objetivo suplir lo mejor que pueda las bajas de Ane Bergara y Nerea Gabirondo. Dice que le motiva la cantidad de incorporaciones, porque así habrá competencia para hacerse con un puesto. “Ahora todas tenemos que luchar”, subraya. Una central, aparte de fuerza –cualidad que destaca en Iparragirre según nos cuenta Ane Etxezarreta-, “no puede olvidarse de la técnica”, explica la de Lasarte, “aunque se utilice más en ataque”. 

Ane Etxezarreta logró ascender a la Primera División con el Oiartzun recientemente. Tenía la opción de jugar en la máxima categoría, sí o sí, pero la llamada de la Real le hizo muchísima ilusión. “Fue difícil decidirme, porque el Oiartzun también estaba en Primera”, admite la beasaindarra. Pero para ella es “un reto muy ilusionante” ir a un equipo nuevo y conocer gente, y es por ello que decidió aceptar la propuesta del club donostiarra. Explica, humildemente, que intentará aportar todo lo que pueda con la elástica txuri-urdin, a pesar de no ser una jugadora con mucha técnica. 

Lo que distingue a la mayoría de estos fichajes es la polivalencia. Pueden jugar en más de un puesto, y cumplen lo que se les pide. Manuela Lareo, al igual que Izaskun Leoz, puede jugar en cualquier posición de ataque. Paola Soldevila puede actuar de central como de lateral. Ane Etxezarreta tanto de media punta como de centrocampista –así le hemos visto en los partidos de la fase de ascenso con el Oiartzun-. 

Y podemos decir que Nuria Mendoza puede jugar en cualquier puesto. En la temporada pasada llegó a disputar minutos hasta de media punta. “Me siento bastante cómoda en el centro del campo, así como de lateral”, admite. ¿Y de central? “También”. 

Todas se han mostrado con ganas de enseñar lo que han aprendido durante estos años. Y como no, deseando interiorizar cosas nuevas. Manuela Lareo destaca, junto con la juventud y las ganas, lo motivadas que vienen a entrenar el equipo al completo: “Estamos haciendo un buen grupo así que daremos guerra”, advierte con contundencia la gasteiztarra.

AUPA ERREALEKO NESKAK!!!